Este mes de junio nos trae en la memoria dos conmemoraciones trascendentes: el aniversario 180 del natalicio de Antonio Maceo Grajales y el 120 de la partida física del Generalísimo Máximo Gómez Báez. Los lazos que unían a estos dos hombres, cimentados por las guerras emancipadoras, sus familias y el amor por Cuba libre no se pueden describir con palabras.
Máximo Gómez Báez, oriundo de Baní, República Dominicana, nos dejó un legado de luchador por la independencia, que ha estado presente en varias generaciones de cubanos. Llamarlo “Generalísimo” denota el grado tan profundo de admiración y agradecimiento, de amor y decoro, explícitos en la plena identificación del pueblo con ese héroe, que supo retribuir el orgullo y devoción de los cubanos, afirmando ser “dominicano de nacimiento, y dominicano y cubano de corazón”.
Antonio Maceo y Grajales, nacido en Santiago de Cuba, Oriente, fue el protagonista de la Protesta de Baraguá, el gran soldado de nuestra historia, que, a la fuerza de su brazo unió la de su pensamiento en una simbiosis que es legado permanente e imperecedero de luchador por la independencia y contra todo vestigio de colonialismo y discriminación.
A este homenaje se suman, en Páginas de la historia, el recuerdo de los 95 años del natalicio de Armando Hart Dávalos y Roberto Fernández Retamar, así como el 115 aniversario del fallecimiento en La Habana de Fermín Valdés Domínguez, entre otras figuras y acontecimientos relevantes que nos corresponde honrar.
El Boletín también destaca las actividades que las filiales han llevado a cabo para celebrar el inicio de la jornada por el Día del Historiador, que tuvo en Artemisa su acto nacional. A nuestros asociados enviamos la más cálida felicitación por el Día del Historiador Cubano, que se celebra en el contexto del 130 aniversario del inicio de la guerra necesaria y el 72 aniversario de las acciones del 26 de julio de 1953.